TODO TIENE UNA EXPLICACIÓN

Llevo varias semanas sin escribir un post, varias circunstancias me ha impedido hacerlo, pero ya estoy aquí, con ganas, ánimo y fuerza.

Muchas personas se cruzan en tu vida, personas que ni imaginas que conocerías y en qué circunstancias o momentos de su vida lo harían.

Personas con las que te reencuentras por el camino y parece que no hubieran pasado los años entre ellas.

Personas que ya no están, se fueron, por un tiempo o para siempre.

A veces el miedo te hace dudar antes de saltar. Es normal. Muchas veces nos aferramos a lo que conocemos por miedo a descubrir lo desconocido y por no arriesgarnos, dejamos pasar ocasiones y personas importantes, y que nos podrían aportar y dar todo aquello que necesitamos para ser felices.

¡Qué tontos somos! ¡Cómo perdemos el tiempo! 

Qué mundo tan absurdo podríamos pensar… Con lo fácil que podría ser todo y lo que nos empeñamos en complicarlo.

Silencios que no necesitan ni una palabra para ser entendidos. Miradas que comprenden una larga explicación y sonrisas que engloban felicidad. 

Abre los ojos, quizás lo tienes delante y por miedo no quieres verlo. Seamos valientes.

¿DÓNDE ESTÁ MI LÍMITE?

¿Te has preguntado alguna vez donde está tu límite? ¿Hasta donde estarías dispuesto/a a llegar por algo o alguien a quien quieres?

Según el momento de nuestra vida en el que nos encontremos, creo q ese umbral del dolor, ese límite máximo variará.

Yo echo la vista atrás y muchas veces pienso "no se como pude lograrlo, no se como pude aguantar". A día de hoy no se si mi cuerpo y mente aguantaría según qué situaciones, pero si en ese momento lo hice es porque tenía que ser así, y mi corazón quiso que así fuese, y no me arrepiento de nada.

Y porque al final somos eso, MOMENTOS, momentos que nos quitan la respiración, que nos hacen soñar, llorar, reír, sufrir y vivir, pero los que nos dejan sin respiración son los que cuentan, disfrutémoslos.

No hace mucho tiempo un amigo me preguntó: ¿TE ARREPIENTES DE ALGO QUE HAYAS HECHO EN TU VIDA?
Y mi respuesta fue contundente: NO, respondí.

Y así es, yo siempre digo que si en ese momento actué así fue porque el corazón me lo pedía, con lo cual no me arrepiento de nada. ¿Qué hubo cosas que no salieron como esperaba? Pues sí, pero volvería a actuar igual, aunque los resultados fuesen los mismos, y si me tuviera que arrepentir de algo, sería de lo que no hubiera hecho en su momento, nunca de lo que sí hice.

La vida nos aporta experiencias, a traves de ellas nos vemos inmersos en situaciones emocionales que nos van haciendo las personas que somos a día de hoy, situaciones que nos harán mas fuertes o mas débiles, mas vulnerables, mas confiados o desconfiados, mas tolerantes o intolerantes, mas felices o mas infelices, mas agradables o mas agrios, etc… pero algo debemos sacar en conclusión, y es que todas y cada una de las cosas que nos pasan es por algo, todo tiene una explicación, que a lo mejor en ese preciso instante no lo vemos, pero el tiempo nos dirá porqué pasó. Quizás una explicación esté en una mirada, como decía al principio, así que miremos más allá…

"QUIEN NO COMPRENDE UNA MIRADA,

TAMPOCO COMPRENDERÁ UNA LARGA EXPLICACIÓN"

Mientras tanto, a aprender, llega un momento de nuestra vida en el que hay que aprender a vivir de nuevo, porque no nos queda otra que seguir hacia delante.

¿DUDAS EN EL CAMINO?

No suelo dudar. Suelo tener todo muy claro, los pasos a seguir, incluso me atrevería a decir que no doy puntadas sin hilo, aunque dicho así puedo parecer fría! pero no es así!! lo que pasa es que una va aprendiendo… y como me dijo una compañera, ya amiga, la vida nos enseña a puñetazos; puñetazos de los cuales nos debemos reponer, levantar, y hacer mas fuertes y porqué no decirlo, andarnos con más ojo para esquivar el siguiente golpe!!

Y es precisamente porque me gusta tener todo bien atado, que los imprevistos me desconciertan, algo fuera de lo planeado puede ser divertido pero también estresante, jeje, pero a veces cierro los ojos y dejo que la vida me sorprenda, hasta que pueda volver a coger las riendas (puede ser bonito).

Como madre primeriza, son lógicas las dudas a las que nos vamos enfrentando cada día. Dudas como preguntarme si lo estaré haciendo bien como madre, si estaré educando a mi hija de la manera correcta, a veces me da vértigo pensar, en qué podremos estar haciendolo mal (al ser padres separados) y en qué repercutirá en nuestra hija, tanto en el día a día como en el futuro.

Muchos días, los niños nos sacan de quicio… no obedecen, gritan, no comen…

¿Qué le pido a mi hija de dos años?

A veces pienso que demasiado… a veces me enfado mas de lo que debería… y aunque es cierto que hay que ponerle límites desde pequeños, a veces me da penilla

Ayer en el trabajo estaba una clienta con su hija de unos nueve años, bien pues en el rato que estuvo allí que pudieron ser unos 5 minutos, se tiró todos esos minutos regañando continuamente a la hija, era una cosa detrás de otra, daban ganas de decirle: mujer relájate y disfruta de ella!! Pero por supuesto, cada una lo hace de la manera que cree conveniente… o de la manera que quiere/ puede.

Yo pienso: "Si solo quiero que… recoja los juguetes/ se coma toda la comida/ que se monte en el carrito sin montar un espectáculo/ que me obedezca/ que no me saque la ropa del cajón como si fuera el día 1 de las rebajas/ etc…

Y todo eso en una misma tarde, jajjaja, no pido tanto.. ¿no? 

Y a lo mejor ella solo quiere jugar… con lo chiquitilla que es… que por otro lado la quiero seguir viendo como un bebé, un bebé grandote, eso sí, igual que yo de pequeña, en lo que hay cosas propias de su edad  que hacen que ya no sea ese bebé que yo quiero que sea… y es como "nooooo, se me hace grande!!!!", pero no me queda otra, intento disfrutar cada día de ella incluso sabiendo que tras la tempestad de una rabieta viene la calma traducida en un abrazo y un beso, los cuales compensan cualquier momento de estrés/ sacar de tus casillas/ de quicio/ o similar.

Con lo que me reitero pensando que cada día se aprende a ser madre, aprendes que de las dudas luego vienen las respuestas, incluso que esas respuestas te las das tu misma, tu instinto de madre te dice qué hacer, porque siempre lo harás pensando en el bien de tus hijos, y cuando no sé qué hacer, pienso en cómo lo haría mi madre, en cómo podía solucionar eso que le pasaba, no a un hijo, sino a seis, y que si ella podía, yo también!!

Me surgen dudas en cuanto a la vida, a las relaciones, pero pocas la verdad, tengo las ideas muy claras y no cambio de parecer en cuanto a mis pensamientos, aunque por supuesto escucho y acepto propuestas. Sé lo que quiero y lo que no quiero en mi vida, y sé lo que quiero para un rato y lo que quiero para mucho rato o para siempre. El otro día me decía un amigo que me veía muy madura para la edad que tenía, y yo le decía que la vida me ha ido haciendo ser así! las cosas que vives, los "puñetazos" de los que hablaba al principio te van enseñando, guiando por el camino que debes seguir y a quién no debes de seguir para ser más feliz.

Una cosa que he aprendido es a rodearme de gente que realmente vale la pena, gente que me quiere, valora y aporta, y a hacer lo que me sale del alma, si no me apetece quedar con alguien porque sé que no me aporta nada mas que negatividad, ten por seguro que no voy a quedar.

La vida es muy corta como para andarse con tonterías, la vida se nos va sin que nos demos cuenta. Hoy estamos muy bien y mañana lo mismo o no estamos o nos dan una mala noticia. Así que yo por mi parte voy a disfrutar de los pequeños y dulces momentos que te da la vida, unas risas en una conversación, abrazar a alguien que te apetece, tomar café con esa amiga a la que hace tiempo que no ves y contarle las novedades o no novedades, estar con la familia, hijos y sobrinos, pero sobre todo rearme, y buscar la felicidad, aquí, allí o donde esté.

Gracias por todo y sobre todo por dedicar unos minutos de ésta ajetreada vida en leer mis palabras.