domingo, 22 de marzo de 2015

POR TÍ

Parece que fue ayer…

Esta semana harán 6 años desde que se fue la persona mas importante de mi vida, mi madre.
Hace justo un año publiqué un post en su memoria porque se cumplían 5 años desde que se nos fue,… y aquí estoy otra vez, un año después.

VA POR TÍ.

Cuando pienso en el tiempo que ha pasado, no doy crédito.
Recuerdo todos y cada uno de los días que pasaron desde que te diagnosticaron la enfermedad hasta el día que te fuiste.
Fue un año muy duro para todos. Una larga enfermedad deja mucha mella en todos los que te rodean, y qué decir tiene, en la persona que lo sufre. Es precisamente ese sentimiento, el SUFRIMIENTO, el que más predomina. Tu nos hacíais creer que no sufrías, pero no era así. Fui consciente de eso principalmente las últimas semanas. Eras consciente del dolor, y aún así, luchabas como una jabata. 

Hasta días antes no me podía hacer a la idea de que realmente te nos ibas.
Siempre pensaba que te podías mejorar. CREÍ EN LOS MILAGROS. Dentro de lo que pasaba, siempre veía dentro de la oscuridad más absoluta algún rayo de luz, de esperanza, al que me agarraba como un clavo ardiendo, porque no aceptaba la realidad.

Esperanza...
                                    

Recuerdo llamadas, conversaciones con amigas y familiares a los que explicaba como estaba la situación. Y siempre mantenía la esperanza. Era mi manera de sobrevivir. No me podía hundir, porque tu no lo hacías. No me lo podía permitir.

Te recuerdo tanto… 
Recuerdo tu mirada dulce, con la que trasmitías cariño, paz, amor y BONDAD allí por donde ibas. 
Recuerdo tus manos, esas que tanto te agarraba.  
Recuerdo tu risa, tu sonrisa, tu forma de reír.
Te recuerdo en la cocina, en el sofá con tus bracillos cruzados, viendo programas con los que reías y llorabas y me decías "Luci, pues no que estoy llorando??" y como me pusiera a verlo, acabábamos llorando las dos…
Te recuerdo en todas y cada una de tus facetas, como madre, esposa, amiga, vecina, etc…

No sé como lo hacías, pero es que TODO EL MUNDO TE QUERÍA, creo que no conozco a nadie más, del que nunca haya oído hablar mal. Nadie tuvo nunca una mala palabra para tí. Eso era imposible. Todo el mundo que te conocía te quería.

Era muy fácil quererte. 

Hace unos meses, un pariente lejano que hacía mucho que no me veía, me dijo: 

"TIENES EL ALMA DE TU MADRE"

Nunca me habían dicho nada mas bonito en mi vida. Me sentí tremendamente afortunada porque alguien pudiera pensar eso. No sé qué pudo ver en mí para pensarlo. Sea como fuere lo disfruté, aunque  también lloré, me sentí muy orgullosa. Realmente nadie puede tener tu alma, porque eras única. Me conformo con tener un poquito… 

Miro atras y no me puedo creer que hayan pasado 6 años. 
Parece que fue ayer cuando mi tía me llamó para decirme que te habías puesto más malita, que fuera rápido al hospital,… pero yo supe qué esa no era toda la verdad.

Cuando se abrieron las puertas del ascensor recuerdo a todas las personas que estaban allí y que con sus miradas me decían que ya había ocurrido. No hizo falta hablar. Solo llorar.

No me lo podía creer. No me lo quería creer. Tenía derecho a no creerlo.
Por mucho que supiera que más temprano que tarde ocurriría, no quieres aceptarlo, no quieres verlo, porque no quieres que suceda. 

Pero pasó, y tuve que aceptar algo que no comprendería. 
Tuve que aprender a vivir así, a vivir sin tu presencia, pero sí con tu esencia.
Tuve que aprender a afrontar todo lo que venía. Llamadas, personas, etc…. tuve que aprender a afrontar la vida de nuevo y de otra manera, sin tí.

Y así lo hice… 

Como pasa con casi todo, EL TIEMPO es nuestro mejor aliado, y con él, lo malo se olvida o se aparca en un lado de nuestro cerebro, y deja paso a los buenos momentos, a los recuerdos bonitos, haciendo que el sufrimiento del que hablaba al principio vaya desapareciendo. 

El sufrimiento pasa.
Quedan los recuerdos.
El dolor pasa.
Queda el sentimiento.
El tiempo pasa.
Queda tu sonrisa, tu esencia y tu alma en cada uno de los rincones de esta casa y en cada una de las personas que simplemente te ADORAMOS, y lo digo en presente, porque no dejaremos de hacerlo.

Eres parte de nosotros, eres parte de nuestra vida, de nuestros hijos, de nuestro día a día.

Aunque hayan pasado 6 años, y por un lado parece que fue ayer, por otro pasan los años volando, es cuanto menos contradictorio.


Sea como fuere, siempre estás en nuestros corazones.

Siempre contigo.

MI VIDA, VA POR TÍ.







No hay comentarios:

Publicar un comentario