La convivencia

La convivencia, ese paso tan grande, tan bonito y difícil a su vez.

Cuando se da este paso son muchas las dudas que se nos vienen a la cabeza pero también muchas ilusiones, es un proyecto común en el que a partir de ese momento sois dos para todo, ya no os separáis por la noche y cada uno se va a su casa.

Nunca sabemos lo que de puertas para adentro pasa en una pareja. Pueden parecer la pareja perfecta sin embargo en casa, solos no se entienden. O al contrario, los puedes ver muy diferentes pero sin embargo congenian fenomenal.

Los primeros meses de convivencia deben ser los mejores, pero también son los más difíciles, ese primer año es duro!!!
Hay que adaptarse el uno al otro, para todo, gustos, formas de hacer las cosas en casa, comidas, horarios etc...
Y estas pequeñeces pueden hacer mella, y no todo se aguanta. Por eso hay tantas parejas que al poco de casarse se separan. Esto pasa porque no soportan muchos de los roces de la convivencia por los que todos hemos pasado. Y a la primera de cambio tiran la toalla y cada uno para su casa.


Según mi punto de vista y tras haber escuchado muchas historias de recién casados, llego a la conclusión que para que una pareja funcione y esa convivencia funcione es la COMUNICACIÓN.
"La comunicación es el proceso mediante el cual se puede transmitir información de una entidad a otra, alterando el estado de conocimiento de la entidad receptora.
(Wikipedia)"

Transmitir información..., parece fácil pero no todos están por la labor.
Entre una pareja es fundamental comunicarse para comprenderse, para entender al otro, para saber qué le pasa, para ser empático y ponerse en su lugar, para saber qué se le está pasando por la cabeza, para saber porqué está de mal humor, para saber qué le ha pasado y saber en qué podemos ayudarlo, o simplemente para saber como le gustan las cosas del día a día.

Es comprensible que después de un largo día de trabajo, se tengan pocas ganas de hablar. Pero también hay que ponerse en el lugar de la pareja, que a lo mejor lo único que quiere es que le cuenten algo diferente a lo que ha vivido en ese día.

No se trata de detallar cada hora del día, se trata de comunicarse, entablar una conversación, preguntar cómo ha ido el día, ser amable, interesarse por la otra persona, dejar por un rato el dichoso móvil y otros dispositivos móviles y simplemente ESCUCHAR y CONVERSAR.
Pero para eso hay que estar dispuestos,cubiertos a escuchar y que te escuchen, y hay que poner de nuestra parte y de la suya.

No es tan difícil!!!!

Cuando esto no ocurre un día, ni al siguiente y es reiterado pueden llegar los problemas, no pasas ni una, y todo te cabrea.

Y piensas... ¿En qué momento nos iríamos a vivir juntos con lo agusto que estábamos cada uno en su casa? Jaja!

Es entonces cuando se ha de utilizar el sentido común.

Si el amor está presente, y el futuro en mente, un futuro juntos, es necesario tener presente que hay que mirar en la misma dirección. Ese presente y ese futuro van de la mano, vais de la mano, JUNTOS.

No hay que rendirse tan pronto, no hay que tirar la toalla, esos primeros meses de convivencia son difíciles, pero también son bonitos, se viven momentos únicos y el amor está muy presente.

Con intención, ilusión, con una escucha activa y la comunicación siempre presente se consigue que la convivencia sea fructífera.
Pero sobre todo, y para mi lo más importante, la comunicación y el respeto.
Que no se pierda nunca.